Inglaterra no lució el brazalete pero sí se arrodilló en contra del racismo
Harry Kane, con la mano mirando al cielo y las rodillas en el suelo, encabezó la protesta de Inglaterra segundos antes de su debut en la Copa del Mundo. Los isleños quisieron hacer visible su rechazo al racismo como vienen haciendo en la Premier League desde el asesinato de George Floyd a manos de la policía en Estados Unidos en 2020.
El delantero del Tottenham lideró a sus compañeros en un comportamiento que todos imitaron. Kane se arrodilló durante cinco segundos y nadie en Inglaterra le dejó atrás en una de las primeras imágenes simbólicas de este Mundial.
Los chicos de Gareth Southgate, sin embargo, no pudieron lucir el controvertido brazalete One Love. Este signo iba a ser empleado por varias selecciones para denunciar la homofobia en el país organizado, Qatar. Hay que recordar que las siete selecciones que iban a protagonizar esta protesta eran Inglaterra, Gales, Bélgica, Dinamarca, Alemania, Holanda y Suiza. Todas ellas emitieron un comunicado en la mañana del lunes denunciando presiones de la FIFA para que no luciesen el One Love.
“La FIFA ha sido muy clara, impondrá sanciones deportivas si nuestros capitanes portan los brazaletes sobre el campo. Como federaciones nacionales, no podemos pedir a nuestros jugadores que se arriesguen a sanciones deportivas, incluidas tarjetas amarillas”, dijeron en un comunicado.
Este movimiento comenzó en 2016 con el jugador de fútbol americano Colin Kaepernick, quien fue suspendido en aquel momento por ese gesto por la NFL. Veremos si la FIFA también prohíbe este gesto después de amenazar a las selecciones que iban a apoyar el brazalete One Love.